Explorando Géneros Musicales

Por Renata Zarazúa Gómez / Jueves 23 de enero del 2020

Todos idolatramos a un artista y sus notables géneros y estilos, como el introspectivo R&B de Khalid o la técnica de reggaetón de J Balvin con ritmos tropicales, que cambian regularmente con cada canción que lanza.

Entonces, ¿qué pasaría si nuestros artistas favoritos cambiaran repentinamente esos géneros y comenzaran a experimentar con otros sonidos?

Estamos viviendo en una nueva y emocionante era para la música. No hay que esperar más en fila para comprar nuevos discos, ya no hay música agotada y olvídate de los CDs rayados. En otras palabras, la accesibilidad de la música ya no es una preocupación para las personas. Hoy en día existe una sobre saturación de contenido para los usuarios y eso nos da muchas opciones en el mundo digital. Vivimos en un mundo musical que está constantemente cambiando en el que ya no tenemos que ser prisioneros del orden de una lista de canciones. ¡Ya podemos decidir qué canción escoger, qué artista queremos escuchar a continuación o qué álbum queremos escuchar sin siquiera cambiar el CD!

Pero, ¿qué significa esto para los artistas? Dado que la habilidad de cambiar de canciones se ha vuelto tan fácil, ahora podemos escuchar a muchos artistas y bandas diferentes mientras mantenemos un solo género. Puede ser que un artista lance un álbum completo, pero que algunas personas solo escuchen una canción, tal vez dos. Entonces, ¿se ha vuelto más difícil para los artistas lanzar música que todos quieran escuchar? ¿Será conveniente para ellos mantenerse al día con las ultimas modas musicales y cambiar los géneros?

Artistas, como Justin Bieber, Taylor Swift o Ariana Grande, son algunos de los artistas más vendidos del mundo, y no importa cuán significativo sea su cambio en la música, siempre venderán millones de copias. Están en un punto de sus carreras en el que pueden salirse con la suya porque no afectará sus carreras. Sin embargo, todos recuerdan el cambio brusco de Taylor Swift de música country a pop, o el cambio de Justin Bieber de pop a rap de vez en cuando.

A lo largo de los años, he notado que, a diferencia de los artistas en los Estados Unidos, la música latinoamericana cambia mucho más seguido porque los artistas buscan tendencias y modas nuevas. Cada año (a veces menos), la música cambia y, por lo tanto, los fanáticos comienzan a buscar otras direcciones. Normalmente, si alguien ve algo que tiene éxito o potencial y les gusta, lo copian y, de repente, hay un estilo completamente nuevo – a veces incluso un género completamente diferente, al que un artista en particular ha cambiado.

Esto pasó claramente en el 2015 cuando del reggaetón, se inspiró un nuevo género: el trap. El reggaetón como tal puede evolucionar (de hecho, también fue inspirado en el reggae), pero no dejará de existir y, al evolucionar, este nuevo subgénero salió a luz. Hay varias diferencias importantes entre estos dos estilos de música y entre ellas están el origen y la letra.

El ritmo del reggaetón suele tener un toque tropical y esto se viene a que nació en Panamá en los ´70s y se popularizó en Puerto Rico alrededor de los ´90s. El trap latino es muy reciente y moderno, pero su origen electrónico viene desde Estados Unidos en los ´90s. La letra del reggaetón siempre fue y aún es tema de crítica por cosificar a las mujeres. Los temas más comunes del genero son fiestas, amor, y sexo. Esto se puede ver en canciones icónicas como “La Gasolina” de Daddy Yankee o “Borró Cassette” de Maluma. Por lo contrario, el trap suele ser más oscuro y normalmente habla de muerte, dinero, armas, y sexo. Los artistas más conocidos del trap son Bad Bunny, Anuel Aa, y Bryant Myers entre muchos. El trap cosifica mucho más al sexo femenino que el reggaetón, pero el trap es la primera fase del reggaeón que logra incluir en sus letras la lucha de la vida cotidiana que estos artistas solían sufrir y que mucha gente de los países latinos aún sufren. Muchas personas dicen que el trap es pasante; que es cosa de moda y que algún día pasará, pero el reggaetón es de por vida. Otros subgéneros latinos recientes son una mezcla del reggaetón con bachata, como con Romeo Santos, con vallenato, como algunas de Carlos Vives o Silvestre Dangond, y el más común, con pop como con Sebastian Yatra. 

Siento que muchos artistas obtienen malas críticas si cambian su género o estilo para un nuevo álbum o para reinventarse. Todavía recuerdo haber visto al magnate de EDM, Avicii, en línea durante su set Ultra Music Festival en el 2012. Subió al escenario e invitó a Madonna a cantar junto a él para promocionar su nuevo sencillo, “Girl Gone Wild”. En pocas palabras, Avicii tocó sus últimos singles por primera vez frente a miles de personas, en persona y en línea, y la gente solo escribía lo horribles que eran. Solo comentaban cómo ese estilo, que es Country-EDM, nunca debería haberse inventado. Si solo supieran que estas canciones serían una gran parte de la historia de la música… Estas canciones incluyen, entre otras, “Hey Brother,” “Wake Me Up,” y “Addicted To You,” que se convirtieron en algunas de las canciones de EDM más escuchadas en muchos países.

Los artistas que no son tan conocidos probablemente no quieren cambiar su género como medida de precaución. Algunas veces debilitan su base de admiradores, y otras veces un cambio brusco puede ponerlos en una zona peligrosa en la industria. Otros probablemente sienten que su género particular es su fuerte y no sienten la necesidad de un cambio.

Creo que hacer un cambio siempre está bien porque nos permite ver dónde hay margen de mejoría y también demuestra de lo que te has estado perdiendo. Cuando se trata de música, los límites no son éticos. Incluso, si quieres el mismo género para siempre, está bien, pero cambia algunas cosas de vez en cuando. El cambio hace que la música sea emocionante. Nosotros los seguidores y escuchadores tenemos mucho por delante, no solo en 2020 sino en los próximos años, y es esencial mantener una mente abierta a las nuevas ideas e innovaciones de los artistas.

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